Loro Parque Fundación, a través de su Departamento de Educación, ha realizado una salida en barco para que los estudiantes de IES Tomás de Iriarte reconozcan a Canarias como punto caliente de biodiversidad marina, con especial atención en los cetáceos.
Para ello, primero se realizó una sesión en el centro educativo en la que se detallaron las características geográficas y oceanográficas del archipiélago que hacen de este un lugar privilegiado para la vida marina. A través de varias actividades y juegos, se mostró al alumnado algunas de las especies más características de Canarias. También, se habló de las especies de cetáceos que frecuentan nuestras costas y se trabajó con claves dicotómicas para aprender a identificarlas atendiendo a sus características físicas. Además, se abordó la importancia de estudiar sus sonidos como herramienta para investigaciones científicas.
Una vez concluida esta sesión, se llevó a cabo la segunda parte de la actividad: una salida en barco al sur de Tenerife para poner en práctica lo aprendido en el Centro. En el barco, los estudiantes pudieron identificar a las especies que se encontraron durante el recorrido y analizaron distintas actividades humanas que pueden perjudicar a la vida marina, como pueden ser los residuos, la contaminación acústica, las actividades de avistamiento no responsable o el tráfico marítimo, entre otras.
Esta actividad, que ha surgido a través de una colaboración con el centro educativo y la empresa Freedbird, pretende que el alumnado descubra la biodiversidad de las costas y la importancia de cuidarla. Además, ha permitido que los escolares observen de primera mano la aplicación real de las investigaciones científicas para la conservación, esperando fomentar así su interés por la ciencia y el estudio de la naturaleza.
Con estas acciones, que se realizan de manera continua, Loro Parque Fundación refuerza su compromiso con la educación y pone de manifiesto su papel esencial como herramienta de conservación.
La biodiversidad de los cetáceos y su estudio
Esta salida también contó con la participación del grupo de investigación de Bioacústica de la Universidad de La Laguna, que probó una nueva tecnología que pueda ser aplicada a los vehículos autónomos marinos y a las boyas para la monitorización acústica de los cetáceos en Canarias.
Así, se podrá determinar cuáles son las zonas que frecuentan estos animales y las actividades que realizan en ellas e, incluso, en un futuro, se espera que esta tecnología pueda ser aplicada en la Macaronesia.
Estos avances tecnológicos se basan en los más de 10 años de trabajo con el sistema de Orca Ocean de Loro Parque y se aplicarán al proyecto “CanBio”, cofinanciado por la Fundación y el Gobierno de Canarias con dos millones de dólares en un plazo de cuatro años, que estudia los efectos del cambio climático en el mar y en la biodiversidad marina de Canarias y la Macaronesia.